jueves, 18 de octubre de 2012

Crónica & Reportaje


Crónica:
¡Momento de angustia mezclada con felicidad…!


La etapa de mi vida que les contaré a continuación ha sido el momento de mayor felicidad en lo transcurrido de mi vida: La etapa de mi gestación en la barriga de mamá.

Aunque mis papitos se conocen desde muy pequeños, hace 5 años empezaron una relación sentimental. Su noviazgo siempre  ha sido aceptado por las dos familias, pero con responsabilidad por parte de mis dos abuelitas, pero un 30 de abril cuando mi mamá sintió su cuerpo extraño decidió hacerse una prueba de embarazo la cual salió positiva, creí que la llegada mía cambiaria la vida de ellos y sería diferente desde ese momento.








En esos días transcurridos solo mami sabía de mi existencia, mi papito, la empezó a notar muy rara a ella y con mucho sueño, lo cual no era normal; pasaron 10 días cuando él decidió que mi mamá se realizara de nuevo la prueba de embarazo, ¡ella ya sabía el resultado!; cuando él vio que era positivo, yo escuche que le dijo: “Jenny, sé que no era el momento pero por mi bebe y por ti luchare con quien me toque”  yo quede feliz de la reacción de él, pensé que no me iban a aceptar, ya que llegue en el momento menos esperado, pasaron 15 días cuando mis dos familias se enteraron, fue la noticia más desagradable que en ese momento escuchaban, lo percibí porque mamita se puso muy triste y lloraba bastante.

Mis papitos aburridos y tristes de la reacción de los demás, no querían seguir viviendo en sus casas, pero en ese momento eran adolecentes y no tenían tal vez un sustento para formar un hogar estable para mi, por lo cual tuvieron que quedarse en la casa de cada uno, siendo yo la fuerza cada vez que ellos querían irse, pensaban en el bienestar mío y no solo eso sino debían seguir estudiando para un mejor futuro para los tres.

Mi abuela materna muy frustrada de lo que se acababa de enterar, decide alejarse un poco de mi mamita y yo, no yéndose de la casa ni dejándonos abandonados, pero si siendo indiferente con nosotros, a pesar de eso ella decidió al otro día llevarnos al Hospital de Meissen (Bogotá, Colombia) para iniciar el proceso prenatal de ella y mi control de crecimiento, que fue en ese mismo instante, cuando le realizaron la primera ecografía a mi mamá yo tenía 2 meses y  5 días y solo era una bolita pequeñita en su vientre, pero ella al oír mi corazoncito como latía de rápido me hizo sentir que estába muy feliz, pensé en ese momento una vez que era aceptado y que tendría la oportunidad de nacer. Pero cuando los compañeros de colegio de mi mamita se enteraron la empezaron a juzgar y siempre la hacían sentir menos hasta el punto que casi todos los días lloraba, me sentía culpable, a excepción de sus 4 amigas.
Mi tercer mes fue de los más felices para mi familia pues sabrían si era yo un niño o una niña,  ese día recuerdo que salimos de clases con mi mamita y nos fui para el control con mi abuelita materna, cuando la doctora les dijo ¡es un niño! Ella abrazo fuertemente a mi abuelita  y le dijo que yo sería su ángel guardián.


Mi cuarto mes de gestación me empecé a mover más seguido, y mis papitos lo notaron,  mamá se inscribió a un curso de cómo ser mamá y estimulación para el mi desde la barriguita, de ahí ella aprendió que a nosotros hay que colocarnos música antes de ir a dormir, hablarnos, y estimularnos para nuestro conocimiento se valla despertando, desde ese entonces mi abuelita me compro un Cd, de Mozart y todas las noches lo escuchábamos los tres.
En mi quinto mes fuimos a viajar a Mesitas del Colegio, con mamita, pero la verdad no me gusto mucho el calor que hacía y no me podía acomodar mi casita se sentía muy estrecha por lo que tenía que moverme y mi mami me regaño una noche que no la deje dormir, cuando regresamos a Bogotá, me puse muy feliz al oír las voces de mi abuelita y de papá, cuando él nos vio nos abraso y se acerco a mi me dijo” lo extrañe arto, nazca rápido porque, papi usted tiene que ser un hincha de millos como su papá, nazca rápido para ir a la cancha e irnos a jugar micro,”  me dejo pensando porque en mi familia por parte de mama son de nacional y mi papito es el único de millonarios, siempre han habido como esos enfrentamientos por equipos, no sé qué hacer lo decidiré cuando nazca, haremos un dialogo de hombre a hombre dije entre mi.


Nuestro sexto y séptimo mes no hicimos nada extraordinario, pero les cuento que tenemos dos mascoticas las cuales se llaman chavito y canela, ellos subían a dormir con nosotros cuando mi abuelita se iba a trabajar, y mi perrito chavito lambia la barriguita de mama siempre a la espera de un movimiento mío para poder quedarse dormido me sentía feliz, aparte de eso como prácticamente estudiamos los dos nos dedicamos a terminar los estudios de mi mami muy bien, para demostrarles a los que un día la juzgaron que ella podía ser la mejor, las amigas siempre apoyándonos y haciéndola sentir querida por ellas, me esperaban con ansias.



En mi octavo mes, realizamos el baby shower que fue un 7 de noviembre, y gracias a Dios me dieron muchos regalos, mis papitos estaban muy felices pero a la vez sentí a mi mamá muy nerviosa porque se acercaba el momento  de mi nacimiento, este mes nos dio un poco duro ya que mi papito se fue a trabajar de domingo a domingo y no lo veríamos dentro de mes y medio, y preciso llegaba diciembre, pasamos el día de las velitas solos y muy tristes sin él.

Llego mi noveno mes y aun no hago señales de parto, mi mamita estaba un poco preocupada ya que cumpliría 40 semanas dentro de ella y yo no nacía, ella sabía que era de alto riesgo, pasamos el 24 de diciembre al lado de la familia de papá, después el 28 mamá se  levanto muy extraña se sentía hinchada y no quería ni levantarse, mi abuelita paterna se preocupo y nos llevo al hospital pero aun no era el momento de mi nacimiento, el 31 de diciembre lo pasamos con mi familia materna y ese día nos acostamos muy temprano eran las 8 de  la noche.

El 2 de enero decidimos ir al parque Metropolitano Simón Bolívar, un paseo en familia, caminamos tanto que al otro día mi mamita no podía pararse pues sentía que yo estaba muy bajito y le daba miedo que me pasara algo por no guardar reposo, ese día por la noche ella se baño con agua fría, pero ya estábamos acostumbrados y cuando salió le dio un cólico muy fuerte mi abuelita materna pensó que a mi mamá le había entrado un frio 
nos acostamos pero aun así seguía el dolor, ella sabía que era el momento de conocerme, al otro día mi abuelita nos iba a llevar al hospital, pero para ella fue más importante el aseo de la casa que los dolores de mi mami, toco esperar hasta que terminara el oficio, luego nos llevo e ingrese a la 1:45 pm al hospital, y yo nací a las 2:15 pm, estaba feliz de conocerla y ella cuando me vio lo primero que me dijo fue: Bebe saliste igualito al papá y sonrió, ella se sentía feliz al tenerme a su lado pero muy triste al saber que mi abuelita estaba mal detrás de esa puerta de la sala de partos.


Esta es mi primera foto salí sonriente tenía en frente a mi abuelita.





 Esta fue la primera foto con mis papitos
......................................................!!!!!!! FIN!!!!............................................. 

Reportaje...

Mis hijos son mi fuente de vida.

Esta es la historia de una mujer que por petición de ella guardaremos su identidad y la de los dos menores, a ella la llamaremos Isabel, a su hija, Michel y a su hijo John Freddy.
Desde muy pequeña está acostumbrada a trabajar ya que su familia es de muy bajos recursos y además de eso es la hija numero 14 de 20 hermanos, pero hace 15 años su vida empezó a cambiar al momento de la gestación de John, pensó que su vida sería mejor, al lado de su esposo, decidió abandonar su familia por formar un hogar sin pensar las consecuencias que más adelante le traería.

Cuando su hijo John nació su esposo decide abandonarla dejándola con su hijo de  dos días de nacido, ella al ver que su hijo empezaba a pasar necesidades empezó a vender dulces en la calle para sustentar las necesidades, vuelve a su casa familiar donde su mamá la recibe pero después de haberla regañado y a verla hecho caer en cuenta que un hijo no es la mejor opción, ella a pesar de las discusiones con su madre agacha la cabeza ella cuenta que decía: “ mama así usted me trate como me trate yo pienso es en el bienestar de mi hijo, perdóneme

Su hijo John fue creciendo y desde muy niño le gusto colaborarle a su mama en su trabajo, pasaron casi 9 años y ella consigue un nuevo compañero sentimental el cual le promete amor eterno y nunca sufrimientos, decide salir de nuevo de su casa esta vez con la mentalidad positiva que todo será mejor, al mes queda embarazada de su hija Michel, y aun así siguió trabajando, por que el hombre con el que había decidido tener otro bebe, “no le gustaba hacer nada solo echar vicio” dice ella. Y no solo eso él la maltrataba hasta punto que llego ella a sufrir fracturas de brazos y piernas por culpa de unos celos amorosos, dice ella: “yo creo que del 100% de mujeres que habitamos en el barrio el 90% somos madres solteras, pero es mejor así que andar con una persona que solo le brinda maltrato a uno”, ella aburrida de la misma situación cada vez que él se drogaba decide abandonarlo y cambiar de barrio, no estaría dispuesta a volver a donde su madre sabía lo que le esperaba.

Isabel, llegó al barrio Lucero Medio en el año 2008, y es cuando decide empezar de nuevo al lado de sus dos pequeños, alquila una pieza donde solo podía ir a dormir, ella se va haciendo amiga de varios comerciantes del barrio y en 2009 logra que entre todos le regalen una carreta y ciertos paquetes de dulces y chocolatinas, ella muy feliz decide no solo vender eso si no en fechas especiales vende cosas de acuerdo a la ocasión y así es como en últimamente se ha logrado estabilizar económicamente hoy su hijo John Freddy vende helados por todo el barrio mientras Michel se encuentra en un jardín de Bienestar Familiar, ella vende sus dulces y chocolatinas todos los días de 9 Am a 10 Pm siempre con su peinado cola de caballo, ruana azul desmechada y sus sandalias rojas que la han acompañado durante mucho tiempo, y siempre con sus hijos para todos lados bien arropaditos y con ropa viejita como la llama ella.
Hoy 29 de septiembre ella dice que “puede darle gracias a Dios por las fuerzas que le dio para poder salir adelante, y segundo gracias a los vecinos que en los momentos que estoy mal me ayudan sin esperar nada a cambio”

No hay comentarios:

Publicar un comentario